Pudin de Chía

·         1 Granada (desgranada)

·         1 Vaso de Chía en remojo

·         1 Cucharada de Lúcuma en polvo

·         2 Cucharadas con Sirope de Arce (opcional)

Pasamos las 2 chirimoyas por un colador, quitamos las semillas, luego añadimos a la batidora junto a la Chía y el Sirope de Arce y lo batimos hasta que quede cremoso.

Luego cogemos una copa y lo añadimos por capas, 1 de pudin de Chía y otra de granos de granada, y así sucesivamente hasta el tope y lo decoramos con una hoja de menta o hierbabuena . ¡Ya tenemos un postre fácil y nutritivo!

– Su contenido de Omega 3 ayuda a reducir el colesterol malo y los triglicéridos, refuerza los niveles de energía y favorece la concentración frente al déficit atencional.
– Mejoraría el equilibrio emocional y actuaría en contra del desarrollo del Alzheimer.
– Reduce el apetito al proporcionar una sensación de saciedad, efecto saciante.
– Ayuda a limpiar el sistema digestivo gracias al gel que se crea al remojarla.
– Favorece la regeneración de los tejidos regulando la coagulación de la sangre.
Contribuye al crecimiento y la regeneración de tejidos durante el embarazo y lactancia.
– Proteínas de alto valor biológico al contener todos los aminoácidos esenciales.
– Mejora la salud cardiovascular, especialmente por su contenido de Omega 3.
– Facilita la digestión, especialmente por su contenido de fibra.
– Refuerza el sistema inmunológico. Acción anticancerígena. Puede contribuir a prevenir el cáncer de mama, colon, entre otros, así como a reducir el crecimiento de las células cancerígenas y la movilidad de las mismas.
– Mejora la movilidad y funcionamiento de las articulaciones. Actuaría en contra de inflamaciones, con ello tendría acciones benéficas contra artritis y asma.